Quiero y quiero.

                   Quiero hacer todo lo que me digan que no puedo hacer. Quiero hacer las cosas eternas, que los siempres duren para siempre de verdad y que el verbo mentir no esté en nuestro vocabulario. Quiero dar menos importancia a las cosas y más a las personas, o al hecho de vivir. Quiero quererte. Quiero reírme de la ironía, de mí, de ti o de ellos. Quiero que te des cuenta que de verdad no te tengo envidia, si no complejo de inferioridad que me mata día a día. Quiero que desaparezcan las personas que no me importan. Quiero que haya más gente como vosotros, mis amigos, para que haya más chicas que sepan lo que es de verdad tener suerte. Quiero desengancharme de mis vicios, porque tengo miedo, jamás he necesitado algo más que respirar para vivir. Si todo lo que sube, tiene que bajar, lo aceptaré. Será el precio de estar en el paraíso durante un período indefinido de tiempo. Y sí, me caeré de boca. Pero es el precio que estoy dispuesta a pagar.